El Puente de Brooklyn

Puente Brooklyn

Uno de los paseos tradicionales que ofrece la ciudad de New York es el Puente de Brooklyn. Se puede realizar en cualquier vehículo motorizado como un automóvil o motocicleta, en bicicleta o a pie. Si el tiempo no los apremia disfruten de cruzar el puente desde la ciudad de Manhattan hacia Brooklyn a pie. Es una experiencia hermosa comenzar la caminata algunas horas antes de que caiga el sol para poder apreciar la espectacular vista que desde allí se observa tanto de día como de noche.

La mayoría de los turistas se hospeda en hoteles en el corazón de Manhattan, por eso indicaremos cómo llegar desde ese punto.

En la estación 96st del subte línea C (azul) tomar el que se dirige hacia Euclid Avenue y bajar en Chambers st. Este viaje toma alrededor de 20 minutos. Una vez en Chambers deberán caminar hacia el nordeste unas 4 cuadras sobre Warren st. El ingreso al sendero peatonal es muy visible y está claramente indicado para que no haya confusiones. Una vez en el puente podrán observar que en el medio hay 2 carriles de uso exclusivo para bicicletas. Hay que estar atento ya que, en ocasiones, algunos pasan a gran velocidad y en un descuido puede suceder un leve accidente.

Dependiendo del ritmo de caminata de cada persona, pueden estar unos 25-30 minutos en caminar los 1.825 metros de extensión que tiene el Puente de Brooklyn.

Una vez en Brooklyn pueden continuar el paseo recorriendo sus pintorescas calles, recorrer alguna tienda o subir algunos grados la temperatura corporal tomando un café si es que están viajando a New York en invierno. En este caso no olviden llevar camperas ya que las temperaturas oscilan los -5°C y 5°C y en el medio del puente hay mucho viento lo cual provoca un efecto aún más frío.

Si están de viaje en New York no pueden dejar de caminar por el Puente de Brooklyn. De noche o de día van a ser una experiencia inolvidable y podrán disfrutar una panorama espectacular para tomar fotografías de esas que uno guarda en su memoria.