Imperdible: Vive la experiencia de asistir a un juego de NBA

Durante nuestras vacaciones por la Costa Oeste de Estados Unidos teníamos la idea de ir a ver un partido de NBA. No es que seamos fanáticos del básquet ni mucho menos pero queríamos vivir la experiencia y ha sido realmente alucinante, de principio a fin.

En California hay 4 equipos de baloncesto: Los Angeles Lakers, Los Angeles Clippers, Golden State Warriors (San Francisco) y Sacramento Kings. Por mayor popularidad y porque en ese momento Lebron James se encontraba jugando allí queríamos ver a los Lakers pero no logramos coincidir fechas de juego con nuestra agenda de viaje. Empezamos a buscar y justo nos quedaba una tarde-noche libre para ver a los Warriors en la ciudad de San Francisco. Empezamos el research y aquí va todo el resumen de cómo es ir a un juego de NBA.

Dónde compro las entradas para la NBA?

La página oficial para adquirir los tickets es Ticketmaster. Allí deben seleccionar la opción “Single game” para comprar 1 sólo partido. También se venden desde la misma página los pases para toda la temporada. Luego podrán ver todo el listado de partidos disponibles o hasta seleccionar por equipo o estadio para simplificar la búsqueda. Por ejemplo, si ya saben que quieren ver a los Lakers pueden filtrar únicamente por sus partidos y ver el día, horario y equipo rival.

Una vez que tienen confirmado el partido en cuestión ingresan a las ubicaciones disponibles y verán todas las opciones de compra. Presenciar un partido de NBA no es para nada barato, los tickets más económicos tienen un promedio de USD 80 (los asientos más alejados del court) y pueden alcanzar los USD 65.000 si es una final de playoff. Consideren que el sector contiguo al más elevado del estadio promedia los USD 200.

En la misma web pueden ver fotos de cómo se ve desde los asientos que están por comprar y si existe algún obstáculo que impida la visualización correcta del court estará aclarado.

¿Cómo llegar al estadio y dónde estacionar?

Como todo evento de la industria deportiva y entretenimiento en Estados Unidos también pensaron en esto y en simplificar las cosas. En el caso de los Warriors y su estadio Chase Center de San Francisco, donde juegan de locales, se puede circular con el coche hasta por la puerta del estadio. No existen avenidas y calles cortadas como estamos acostumbrados en Latinoamérica por los partidos de fútbol, en NBA los ingresos son súper dinámicos y no se generan largas filas ni demoras.

La preventa de parking que ofrecía Ticketmaster para sumar a los tickets eran los 2 estacionamientos oficiales del estadio. Uno costaba USD 120 y el otro USD 150. Decidimos no comprarlo con anticipación y alrededor del estadio hay estacionamientos que en sus ingresos ponen carteles con la leyenda “EVENT PARKING”. Esos son los que necesitamos porque cubren una tarifa plana hasta que termine el evento mientras que otros pueden alcanzar su horario de cierre o simplemente no permiten el ingreso nocturno. Terminamos estacionando a 400 metros del ingreso al estadio por USD 50.

La previa al juego y el ingreso al estadio

El clima que se vive en las afueras del estadio es vibrante pero, al mismo tiempo, tranquilo. Fuera del Chase Center hay pantallas gigantes donde se reproducen las mejores jugadas, declaraciones de los jugadores y la formación inicial para el juego. Un DJ en vivo musicaliza la escena mientras otros simpatizantes cantan y bailan.

Por supuesto, la tienda oficial del equipo está abierta y abarrotada de fanáticos (y curiosos) que compran todo el merchandising de “los warriors” como si no hubiera un mañana. Honestamente, el merchandising oficial de la NBA es muy bueno. En especial las camisetas, que tienen precios algo elevados, pero cuya calidad es excepcional.

Durante el partido

Tiene la combinación justa entre deporte y entretenimiento. No existe ni 1 segundo de aburrimiento ya que hay shows preparados para cada momento en el que el juego se detiene. Desde un grupo de bailarines que despliega sus coreografías cuidadosamente estudiadas hasta animadores que recorren las gradas disparando camisetas con unas pistolas gigantes. Sí, todo eso también es NBA. La interacción con el público es algo siempre presente y es el principal factor por el cual no sólo la NBA atrae a aficionados sino también a un público más curioso y sin tanto fanatismo por este deporte.

Como si esto fuera poco, se puede acompañar el momento con una variedad de comidas sorprendentes: burritos, nachos, hamburguesas o hotdogs y por supuesto que se consiguen opciones más gourmet y saludables.

Si dispones de tiempo y dinero suficiente no dejes pasar esta oportunidad de disfrutar un espectáculo único. Hacemos hincapié en que no es sólo para fanáticos del básquet sino para un público que quiere divertirse y pasar un buen momento lleno de energía y buenas vibras.