Las comidas del Hotel Llao Llao
Cómo es el desayuno, las diferentes opciones para comer al mediodía, los detalles del famoso té del hotel llao llao y las cenas en restaurantes imponentes. Te contamos todos los secretos de la gastronomía del Hotel Llao Llao.
Nuestra estadía en el Hotel Llao Llao fue de 2 noches y, tal como ya describimos, nos quedamos en el hotel el día completo del check-out (uno de los beneficios desconocidos por la mayoría y para destacar) y todas las comidas desde que entramos hasta que salimos las hicimos dentro del Llao Llao. Por lo cual tenemos un panorama bastante complejo de las diferentes opciones de comida dentro del hotel y vamos a contar nuestras experiencias sin conocimientos gastronómicos sólidos. Aquí la idea no es sentirse en masterchef sino transmitir nuestras sensaciones para que luego puedan juzgar si vale la pena ir a tomar el té al hotel Llao Llao o conviene ir a otro lugar de calidad similar.
El desayuno del Hotel Llao Llao
El costo está incluido en la tarifa del hotel y, en caso de no ser huéspedes, pueden abonar USD 40 (aproximadamente por el tipo de cambio actual). El llamado "Desayuno Llao Llao" para mayores de 12 años incluye: Servicio de cafetería e infusiones libre. Variedad de fiambres, quesos, yogures, lácteos, cereales, frutas fileteadas, panadería y patisserie artesanal. Variedad de jugos de fruta naturales, waffles y huevos preparados a su elección, opciones calientes entre otros. A simple vista parece bastante completo, cierto?
Los huéspedes deben hacer una reserva previa en el horario que deseen tomar el desayuno directamente desde una página web a la cual se accede directamente con el apellido del titular de la reserva de la habitación o el usuario recibido al hacer el check-in. En caso de ser invitados deberán realizar la reserva telefónicamente.
Huevos revueltos y salchichas. Típico desayuno norteamericano que se puede ordenar en Llao Llao
La primera mañana llegamos al salón desayunador del Llao Llao y nos encontramos con una vista panorámica realmente impresionante. No sólo hacia el exterior en donde, si tienen suerte, y les asignan mesas sobre las ventanas podrán contemplar una postal del Lago Nahuel Huapi y de fondo asomando el cerro tronador sino también el interior del salón. La magnificencia de las escaleras, alfombras, y la robustez de la construcción en madera que perdura impoluta con los años. Todo este contexto que desayunar en el Llao Llao realmente sea una experiencia inolvidable. El ambiente supera ampliamente las expectativas.
Luego de asignarnos una mesa (reservar previamente no significa que ya tenemos un sector asignado sino que sirve al personal para estimar la cantidad de comensales que tendrán en cada turno y, obviamente, evitar posibles saturaciones) la camarera nos indicó que debíamos ordenarle las bebidas calientes o infusiones y que las traerían a la mesa. En tanto las bebidas frías y el resto de la comida debíamos ir a buscarlo a las islas correspondientes. No somos muy partidarios del autoservicio en cuanto a comidas pero aquí cabe aclarar que ninguna de las islas llegó a tener más de 3 personas esperando a ser atendidas. El sistema está aceitado y funciona bien, no se acumula gente. Seguramente les sorprenda contemplar la velocidad con la que el chef encargado de los omelettes realiza una cuasi producción en serie.
Las islas del salón desayunador
Tras las breves indicaciones de la camarera nos informó que en caso de ordenar huevos benedictinos deberíamos pagar aparte y ordenarlo a ella porque correspondía al sector cocina, no a las islas. Hace unos años, cuando estuvimos en Cusco, nos hospedamos en el hotel Monasterio en donde probamos unos huevos benedictinos deliciosos y desde allí se hizo costumbre ordenarlos en vacaciones. Más allá de esta excentricidad que se puede obviar totalmente, nos sorprendió el hecho de tener que abonar un plato como adicional en un hotel de 5 estrellas cuya habitación más económica arranca en USD 300 por noche. Sólo para confirmar lo que el personal (por cierto muy atento) nos había informado ingresamos a la carta (disponible online desde el mismo site que se utiliza para reservar) y notamos que también el salmón, el jamón crudo y la trucha ahumada tenían un cargo adicional. Miren que nos llevamos una pésima experiencia del Sofitel de Cardales pero ni siquiera allí había que pagar un costo adicional por estas comidas. Otro punto flojo es la escasa variedad de té disponible. Uno esperaría encontrarse con las grandes marcas a nivel mundial y sin embargo no hay mucho para elegir.
Dejando de lado esta situación tan particular, el resto está muy bien. Sin ninguna cosa que sorprenda o salga de lo común pero cumple. Más adelante vamos a profundizar en este concepto en donde uno espera que cualquier comida del Llao Llao sea grandiosa y en ningún caso alcanzamos ese grado de satisfacción. Sí, para destacar, la espectacular atención de todo el personal que trabaja en el desayuno. Maitre, camareros y cocineros siempre te reciben con una sonrisa.
Almorzar en el Hotel Llao Llao
Dentro del complejo del hotel hay varios restaurantes en donde uno puede comer. Algunos más informales en sectores cercanos a la piscina, otros más tradicionales como puede ser el house del golf y así diferentes opciones. Como nuestra visita a Bariloche fue en temporada de verano, la mayor parte del tiempo lo pasamos en el sector marina (la playa que el hotel tiene con salida al Lago Moreno en donde hay reposeras, kayaks, etc.) o en las piscinas. Entonces lo que hicimos fue una vez ordenar al restaurante "Espacio Lago Moreno" y comimos en las reposeras y, al día siguiente, comimos en la terraza de ese mismo restaurante con la vista imponente del Lago. Si revisan el menú de cada restaurante verán que no hay demasiada diferencia salvo que estén buscando platos más elaborados para el mediodía. En el espacio Lago Moreno tienen lo que se llama "light meals" que, no precisamente son light a precios razonables. Ensaladas, tapas y sándwiches son las opciones principales.
La espectacular vista desde la terraza del Espacio Lago Moreno del Hotel Llao Llao
Ordenamos una ensalada "Mix de verdes" (USD 26) y un sándwich ciabatta de bife macerado en ajo (USD 34). El lomo viene en pan ciabatta, con morrones y cebollas asadas que combinan muy bien. El provolone que venía en el sándwich según la carta nunca lo encontramos pero, aún así, el plato estaba muy rico. Ahora vamos a la pobre ensalada de Mix de verdes que es un caso aparte. Nunca llegó a ser un mix, la única hoja verde que tenía la ensalada era lechuga y una presentación de cualquier restaurante de barrio. Ni siquiera la acompaña un dressing entretenido para realzar un poco los sabores. Como mencionamos unos párrafos más arriba, nuestra intención no es hacer críticas de cocina ni mucho menos. Tampoco llegaba al punto de realizar un reclamo a la camarera pero sí lo comentamos entre nosotros sorprendidos por la baja calidad del plato que llegó a la mesa. Cuando pedimos la cuenta nos preguntó sobre la comida y allí lo mencionamos no en ánimo de reclamo sino más bien consultando si siempre esta ensalada era así. La respuesta fue un tanto imprecisa alegando que el cocinero presente ese día estaba haciendo un reemplazo y era el día libre del chef responsable de este restaurante.
La triste ensalada de "Mix de verdes" que recibimos =(
Tomar el té en el Hotel Llao Llao
El té se sirve exclusivamente en el salón Winter Garden. Tal como su nombre lo indica la vista principal se orienta a los jardines y, de fondo, el green de golf del hoyo 4. Como en todo lo que respecta al hotel llao llao, las vistas panorámicas son realmente espectaculares. El té se sirve desde las 4.30pm hasta las 7pm y se debe realizar una previa reservación. Como mínimo, recomendamos contemplar 2 semanas previa a la fecha de visita. El costo del menú "té llao llao" es de USD 53 e incluye:
Hasta dos infusiones: café o té en hebras o chocolate y su selección de tortas en triolet y mini sandwiches: Torta Llao chocolate / Lemon pie / Cheesecake / Scon / macaron / cookie / mini gateaux del día / mini bagel de salmón ahumado / chips de jamón y queso / sándwich de miga de jamón crudo y gruyere y scon de queso + Copa de cortesía para el brindis.
Si no son huéspedes del hotel realmente vale la pena la experiencia. Principalmente para tener la oportunidad de recorrer ese inmenso pasillo saliendo de la recepción y la hermosa sensación de atravesar el Lobby Bar para luego ingresar al salón Winter Garden que, por cierto, también tiene mesas en la terraza al aire libre, y pueden ser una buena opción si el clima acompaña. Si se están hospedando en el hotel, está más que claro que tomar el té será de agrado pero no es un must. La Avenida Bustillo está repleta de casas de té de muy buena calidad en cuanto a pastelería y, por supuesto, hermosas vistas.
Cenar en el Hotel Llao Llao
Las opciones para cenar son las siguientes:
- Lobby Bar: ideal para finger food o una comida informal acompañada de un vino o un trago.
- Winter Garden: 2 ó 3 veces por semana se ofrece el menú de sushi libre.
- Cava Llao Llao: Ofrece un menú de 6 pasos con un maridaje de vinos súper exclusivos de diferentes uvas. El precio por persona es de USD 80.
- Restaurante Argentino: La opción más popular ya que tiene platos a precios bastante accesibles. Probamos la provoleta rellena, el bife de chorizo y el plato emblemático del hotel llao llao, el cordero patagónico.
Nosotros cenamos en el Lobby Bar y en el Restaurante Argentino. Al igual que en los almuerzos, la comida pasa sin pena ni gloria.Tampoco es que los platos no estén bien logrados pero simplemente uno tiene expectativas altas, ya sea por el majestuoso entorno del hotel 5 estrellas en el corazón de la patagonia, que no llegan a cumplirse con las opciones de gastronomía que degustamos. Exceptuando Cava Llao Llao que decidimos no ir por el elevado costo del menú. De todas formas, los precios de la carta del restaurante argentino son bastante accesibles y creemos en que ahí está el punto de equilibrio. Si el Llao Llao quisiera dar el gran salto en cuestiones gastronómicas debería, como mínimo, duplicar los precios de los platos. En lugar de ello se prefiere mantener una calidad más discreta y precios acordes a ella, lo cual no es para nada despreciable. El cordero patagónico, por ejemplo, cuesta USD 19.
Creamos una sección especial para conocer la carta completa de platos y precios de cada uno de los restaurantes del hotel. Desde el desayuno hasta la cena, sin olvidarnos del famoso te del llao llao. Ingresa y conoce cuánto cuesta disfrutar la experiencia gastronómica del Hotel.